Además participamos del concurso "Antología de Cuentos 2007" con dos textos que queremos compartir....

AJEDREZ

En un castillo, donde vivía un Rey y una Reina, una noche de tormenta eléctrica y de lluvia, mientras dormían, de las telas de arañas salieron arañas chiquititas que se transformaron en grandes arañas y atraparon al Rey y a la Reina y se los llevaron a la cárcel que había en las torres.
El Rey y la Reina tenían mucho miedo porque ahí estaban las arañas y los monstruos con millones de bocas y trescientas narices….
Pero los peones y los caballos que los querían mucho, les pidieron a los alfiles que les preparen un remedio mágico para enfrentar a las arañas, y se fueron a rescatarlos. Les dieron de tomar el remedio a las arañas y las volvieron chiquitittas.
El Rey y la Reina estaban muy contentos y les regalaron a los caballos un collar y a los peones una flauta.

EN EL RANCHO DE JOAQUÍN

Había una vez un gaucho que se llamaba Joaquín que tenía un poncho marrón, un sombrero negro y orejas de burro. Usaba alpargatas y bombachas blancas que compraba en la pulpería cuando iba a buscar el mate, las botas amarillas que tanto le gustaban, la montura de su caballo y las boleadoras.
Joaquín vivía en un rancho en el campo con una paisana que se llamaba Mara. Ellos tenían un caballo marrón y blanco con estribos negros y paseaban por todos lados. También tomaban mate a la noche cuando estaban tocando la guitarra y la paisana bailaba con el pañuelo en la mano, revoleándolo.

Un día apareció otro gaucho en el rancho que quería a la paisana. Joaquín le preguntó: -¿Y ahora que querés? (Joaquín lo conocía porque una vez quiso comprarle su caballo, pero éste nunca aceptó venderlo porque lo quería mucho, mucho, desde que era chiquitito).
El otro gaucho le respondió: -¡¡Quiero a esa china!!!
¡A mi china no!!!!!!!
Entonces Joaquín sacó su cuchillo del cinturón para pelearse, pero el otro gaucho también sacó su cuchillo, y se pelearon. La china se asustó y los separó y les pidió que sean amigos y que no se peleen más porque ella sólo quería a Joaquín. Después de pensar mucho esa noche en el fogón se juntaron los tres a tomar mate y a cantar payadas….
Y colorín, colorado este cuento del gaucho y la paisana se comieron una manzana…